Un objeto desconocido envuelto en llamas atraviesa el firmamento a plena luz del día. El Ejército del Aire considera que es chatarra espacial entrando a la atmófera.
Los hechos comenzaron el miércoles sobre las siete y media de la tarde, cuando un cámara free-lance, Eduardo de Miguel, que se encontraba por la zona del Club de Campo (municipio de Sant Josep) observó algo inusual en el cielo. Cogió su cámara y pudo capturar en perfectas condiciones casi tres minutos del trayecto descendente que seguía el objeto, en dirección oeste, es decir, hacia Sant Antoni aproximadamente. Según se aprecia en el vídeo (visible en www.diariodeibiza.es), el cuerpo aparece como una bola blanca que despide llamas desde su parte posterior y deja de ser visible cuando se oculta detrás de un monte.
Miembros de la Agrupación Astronómica de Eivissa (AAE) descartaron rápidamente que pudiera tratarse de un meteorito (el vértice del cuerpo parece recto) y apuntaron hacia un artefacto de fabricación humana. Este diario recabó información del Ministerio de Defensa y, tras ser examinado el vídeo por parte del departamento de Análisis del Ejército del Aire, un portavoz oficial descartó totalmente que pudiera tratarse de un cohete, un misil o cualquier ingenio militar, y consideró «prácticamente seguro» que sea un fragmento de «chatarra espacial». En concreto, se trataría de un pedazo (no precisamente pequeño) de nave espacial o sección de cohete que, después de estar en órbita, entrara de nuevo a la atmósfera el miércoles. Cuando ello sucede, los objetos se incendian por la fricción con el aire, desarrollando una estela de llamas y humo.
Sin embargo, esta explicación no acababa de satisfacer ayer por la tarde a los astrónomos ibicencos, que han remitido todos los datos a una red de observatorios españoles dedicados precisamente al estudio de meteoritos y otros cuerpos ingresados a la atmósfera. El Telescopio de Cala d´Hort (TCH) capturó también el fenómeno y descubrió «cosas muy raras en su trayectoria», afirmó el miembro de la AAE Ignacio de la Cueva. Al parecer, el objeto provenía del sur e hizo «algún quiebro o cambio de dirección» que solo podría explicarse si estaba autopropulsado. De hecho, el vídeo de Eduardo de Miguel lo muestra ocultándose hacia el oeste, lo que evidencia cambios respecto a la trayectoria inicial.
Por ello, se confía en que otros observatorios españoles hayan detectado el objeto para así realizar una triangulación de su posición que permita averiguar su tamaño, altura y posible lugar de caída. Con la escasez de datos actuales, podría haber ido a parar al canal de Valencia, a la Península o al Atlántico, pues así de amplio es el margen de otorga la falta de información.
Todas las hipótesis permanecen abiertas, lo que ha provocado que hasta conocidos programas nacionales de radio dedicados a lo paranormal se interesaran por este caso. De momento, estamos ante un Objeto Volador No Identificado.
Fuente: diariodeibiza
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