Las tormentas geomagnéticas hacia la Tierra son posibles el 10 y 11 de mayo en respuesta a una CME entrante de la mancha solar de polaridad invertida AR3296. Los niveles de tormenta deberían oscilar entre G1 (Menor) y G2 (Moderado) con una pequeña posibilidad de G3 (Fuerte).
El pasado 7 de mayo de 2023: la mancha solar de polaridad invertida AR3296, La región activa hacia atrás explotó el 7 de mayo (2234 TU), produciendo una llamarada solar de clase M1.5 de larga duración. La explosión fue directamente dirigida a la Tierra.
La radiación ultravioleta extrema de la llamarada ionizó la parte superior de la atmósfera de la Tierra, produciendo un pequeño apagón de radio de onda corta sobre el oeste de EE. UU. y el Océano Pacífico.
Los marineros y los radioaficionados pueden haber notado pérdida de señal en frecuencias por debajo de 20 MHz durante horas después de la llamarada.
Esta explosión también lanzó una CME hacia la Tierra. Los coronógrafos de SOHO registraron un halo completo.
Un modelo de la CME de la NASA predice que esta llamarada llegará durante la madrugada del 10 de mayo. El impacto podría causar tormentas geomagnéticas moderadas (G2) a fuertes (G3).
Investigadores independientes comentan que esta clase de tormentas solares hacia la tierra pueden producir sismos pequeños y asta terremotos, así como erupciones volcánicas.
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